viernes, 25 de enero de 2008

FUNDAMENTOS PARA EL INICIO DEL ACUARIO MARINO

LUIS FERNANDO CUBILLAS HDEZ.
BIOMUNDO ACUARIO


Todo aficionado al acuarismo después de lograr el éxito en los sistemas de agua dulce, busca nuevos retos y tarde que temprano llega el deseo de instalar un acuario de agua salada, conocido comúnmente como acuario marino. Éste funciona con los principios similares al de agua dulce, pero en el acuario marino debemos utilizar equipo de mayor precisión, equipos de medición de factores ambientales, e incluso, en la mayoría de los casos, preparar de manera artificial el agua de mar o utilizar agua natural de mar tratada, por señalar algunas de las diferencias.
Los organismos marinos son mucho más sensibles a las variaciones ambientales que los dulceacuícolas, de ahí que lo más recomendable es que quien desee iniciarse en el acuarismo marino, preferentemente posea experiencia en sistemas de agua dulce.
La presente colaboración busca proporcionar los aspectos elementales a considerarse para instalar un acuario marino sencillo, es decir uno en el cual podamos mantener en condiciones saludables a un pequeño grupo de peces, que dicho sea de paso, tienen formas y colores difícilmente encontrados en agua dulce. Con la experiencia práctica y la búsqueda de información específica podremos mantener otros organismos más delicados como crustáceos e incluso anémonas y corales.
La pecera o tanque puede ser de cristal, sellado con silicón, o de material acrílico. A este respecto el acuario de cristal es más resistente a la constante fricción producida con esponjas sobre los cristales cuando se efectúa su limpieza, este procedimiento sobre el acrílico generalmente produce rayones que no son fáciles de quitar. Además, el costo del material acrílico es por lo general elevado.
Por razones de mantenimiento lo más recomendable es que los marcos de la pecera sean de material plástico, de los que existen medidas preestablecidas, pero si la pecera está hecha sobre una medida especial entonces se puede usar ángulo de aluminio para hacerlos, pero de ser así, debemos ser constantes en su mantenimiento para evitar la formación de sarro salitroso sobre ellos.
La capacidad de la pecera es un factor muy importante a considerarse para un acuario marino. Como ya sabemos, mientras mayor sea el volumen de agua contenida en el acuario más fácil será mantener buenas condiciones ambientales, bajo este principio la mayoría de los autores recomienda acuario de 40 galones (poco más de 150 litros) de capacidad, en lo personal yo mantuve acuarios de 20 galones ( 80 litros aproximadamente) con dos o tres peces medianos sin demasiados problemas de funcionamiento, incluso hoy podemos crear sistemas miniatura que incluyen corales, pero evidentemente el cuidado de las parámetros ambientales y el mantenimiento es casi permanente. La forma de la pecera puede variar según el gusto del propietario, aunque siempre el acuario rectangular y de altura media provee de buena área de distribución para los futuros habitantes.
Al igual que en agua dulce, el tanque no debe ser colocado en sitios cercanos a corrientes de aire y luz excesiva o radiación solar directa, ya que ésto altera las condiciones físicas del sistema. Los peces marinos son de carácter más asustadizo, así que tampoco deben ubicarse en zonas con excesivo paso de personas.



La preparación del agua para el acuario es por lo general con el uso de una formulación comercial para este fin. A este respecto he de comentar que hay muchas marcas en el mercado mexicano, algunas son de fabricantes de reconocido prestigio, que por lo general son de mayor costo. También existen otras de menor prestigio pero de más bajo costo, aquí lo importante es que usemos una sal libre de nitratos y fosfatos. Nuestro asesor acuarista puede recomendarnos una buena opción basado en su propia experiencia.
Es importante comentar que lo más recomendable para preparar el agua salada artificial es la utilización de agua de ósmosis y si no es posible, entonces agua baja en minerales. Ah, y nunca mezcles agua natural con agua artificial, ésto te puede traer muchos problemas. Cuando recién se disuelve la sal en el agua, esta tiene un aspecto turbio, pero este desaparecerá por efecto de la filtración.
La filtración de nuestro acuario marino puede ser de distintos tipos, hablemos un poco de esto. Evidentemente la filtración biológica es fundamental ya que gracias a ello los desechos de los peces se convierten en compuestos menos tóxicos. En nuestro país el filtro biológico más común es la plataforma, que se coloca debajo del sustrato, en este caso coral triturado, que además de permitir la fijación y reproducción de las colonias de bacterias descomponedoras ayuda a mantener condiciones físico químicas esenciales. Este filtro por su costo y accesibilidad puede ser útil en acuarios destinados a pocos peces, siempre y cuando se instale una cabeza de poder que incremente el flujo de agua por la plataforma y se efectúe constantemente el monitoreo de los parámetros químicos del agua. Si queremos mantener invertebrados sésiles (poliquetos, corales, anémonas, almejas, etc.) es recomendable no considerar la plataforma filtrante para permitir que éstos se fijen sobre el sustrato.
Si deseamos tener mejores condiciones en nuestro sistema, entonces debemos agregar filtros de mayor potencia como los exteriores, conocidos en inglés como canister filter, o sea filtros de canasta, impulsados por bombas de agua y que poseen diferentes cámaras por donde el agua tiene contacto con diferentes medios filtrantes, como cerámica, carbones de alta calidad y fibras especiales que producen agua de buena calidad para los organismos que habitan el acuario. Otra opción es convertir este filtro, a través de las cargas filtrantes, en un filtro mecánico-químico y agregar un filtro de lecho fluido que se encargue de la filtración biológica. Los filtros de lecho fluido trabajan con una cabeza de poder y equivalen a tener una filtro biológico como el de plataforma, pero gracias al diseño del contenedor y a la cantidad de partículas (lodos), que poseen grandes áreas de fijación para las colonias de bacterias, se incrementa la capacidad de filtración y es como si nuestro acuario tuviera una superficie filtrante muchas veces mayor.
Existen también los conocidos como Wet-Dry , los que tienen un área de contacto del agua con el aire y una zona húmeda donde el agua es filtrada de forma parecida al de plataforma, es decir donde se produce filtración biológica para luego ser sometida a otros procedimientos de filtración mecánica y química , incluida la luz ultravioleta. Estos filtros brindan una excelente calidad del agua, pero son costosos, así que, considerando tus deseos y bolsillo, haz tu propia elección.
También es necesario usar la bomba de agua, o cabeza de poder si instalamos un colector de albúmina, que juega un papel muy importante en el mantenimiento de la calidad del agua debido a que ayuda a sacar los desechos orgánicos, como pueden ser excedentes de alimento, materia en descomposición, etc. y de esta forma se reduce la descomposición proteínica dentro de nuestro sistema marino.
La temperatura debe ser mantenida por calentadores automáticos. Los más recomendables son los sumergibles con sensor electrónico por su precisión, estos están sellados de fábrica para que el agua no llegue a su interior. Estos termostatos sumergibles se pueden colocar cerca del fondo asegurando el calentamiento de gran parte de la columna de agua. Los calentadores semi-sumergibles se recomiendan sólo cuando cuenten con capuchones de protección para evitar que se introduzca agua salada a su interior, pero pueden generar fluctuaciones drásticas en la temperatura y afectar la salud de los peces e invertebrados. Cualquiera de los dos tipos debe ser aclimatado por 20 minutos antes de conectarse e iniciar su calibración, ya que de no ser así se corre el riesgo de que se fracture el tubo de cristal por el cambio brusco de temperatura. Cuando se efectúe un cambio parcial, o deba sacarse el calentador del agua, debemos desconectarlo y esperar el mismo tiempo para realizar la maniobra.
La medición de la temperatura se hace con ayuda de termómetros, los hay de cristal con alcohol en su interior, los digitales que se adhieren en el exterior y los electrónicos, todos con un grado de precisión muy similar. La temperatura promedio de 26 grados Celsius mantiene a la mayoría de las especies en buen estado.
Existen también hidrómetros, que nos permite conocer la salinidad del agua, y en algunos casos cuentan con un termómetro integrado. La densidad específica es la medición de la salinidad del agua de nuestro acuario y ésta debe ser de 1.023 en promedio, aunque si introducimos peces de un hábitat específico, también podemos preparar nuestra agua a la salinidad de dicho ambiente.
La decoración se puede realizar con piezas artificiales elaboradas con materiales que no se alteran o afectan las condiciones químicas del agua. También se pueden utilizar corales naturales pero deben pasar por un tratamiento de preparación antes de ser utilizados.
Claro que nada se compara con la vista que resulta de la combinación de algas, vegetales y animales vivos, pero esto requiere de mayor experiencia y equipo.



Como mencioné al principio la mayoría de las veces el agua del acuario es artificial, es decir preparada en base a una mezcla de sales, por esta razón se hace necesario la inoculación de bacterias que se van a encargar de degradar los desechos de los peces, estas bacterias ( Nitrosomas y Nitrobacter ) convierten el ammonia en nitritos y luego nitratos. Estas bacterias se encuentran disponibles en los comercios en medios líquidos o secos donde están latentes y se reactivan cuando están en condiciones ambientales favorables. Para que las colonias de bacterias se reproduzcan debemos esperar una semana después de su inoculación y entonces introducir el primer pez para iniciar el ciclo de degradación, al mismo tiempo procederemos a la segunda inoculación de bacteria y a partir de ahí, según las indicaciones del fabricante.
A partir de la introducción del primer pez, es necesario utilizar los kits de medición para realizar monitoreos constantes principalmente de dureza, pH, ammonia, nitritos y nitratos. Los valores normales están indicados en cada uno de los medidores y siempre debemos mantener el acuario entre estos valores para que los peces vivan en las mejores condiciones posibles.
Los primeros peces que podemos mantener son las damiselas ya que por su talla no serán habitantes que alteren demasiado rápido la calidad del sistema, después podemos introducir pez payaso, hoy muy famoso por la película donde es protagonista, y más adelante intentar con cirujanos, gobios entre otros. Las damiselas se eligen por resistentes y económicas, pero en muchas ocasiones deben ser retiradas del acuario por su conducta territorial. Antes de introducir cualquier especie investiga bien su compatibilidad.
Finalmente la iluminación es el último elemento que mencionaremos, ésta es importante ya que además de ayudar a algunos procesos biológicos en el sistema da el toque final para la apreciación de los seres vivos que habitan nuestro acuario. Existe una gran diversidad de lámparas pero las más recomendables son las que combinan focos de luz de día y actínicos, necesarios para los invertebrados porque permiten simular el amanecer y el atardecer. También hay focos de luz fraccionada , es decir incompleta, que incrementan la coloración de peces e invertebrados. Pregunta a tu acuarista sobre las opciones que existan.
Hasta aquí llegamos por esta ocasión, espero que esta muy breve información les sea de utilidad y les anime, si aún no se deciden, al siguiente reto: tener su primer acuario marino.
¡Hasta la próxima!

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Es un buen artículo sobre el acuario marino, ojalá más adelante escriba sobre algunas cuestiones con mayor detalle.Yo me estoy iniciando en los marinos y me es util esta informacion.

Anónimo dijo...

Que bueno que te sea de utildad la información. Y claro más adelante incluiré más notas sobre algunos aspectos más específicos. Gracias por tu visita y comentario. Espero saber de nuevo de tí, mucho éxito con tu acuario.

Erubiel dijo...

Felicidades, excelente articulo, muy util para los que iniciamos en esta aficion, no dejes de escribir sobre el tema, para nosotros es de mucha utilidad

Anónimo dijo...

Mil gracias por tus comentarios,Erubiel.Espero que cada nota que vaya agregando cumpla con sus expectativas, gracias y sígan visitando este espacio que siempre está abierto a sus sugerencias. Espero que pronto tengamos aquí una foto de tu acuario Marino.

Anónimo dijo...

esta muy interesante, esto lo tomare en cuenta para empesar a crear mi propio acurio marino.

Anónimo dijo...

Gracias por tu visita,Miguel. Me da gusto que la lectura de mi escrito te sea de utilidad, esa es mi finalidad. Así como le dije a Erubiel,espero que pronto me envies las fotos de tu acuario marino para abrir una galeria con todas ellas.Y cualquier duda ya sabes, aquí estaré.

Anónimo dijo...

Hola le escribo para decirle que ya estoy a punto de comprar una pecera como antes no estaba trabajando no podía pero ahora ya quiero tener un acuario marino, y como ya avía visitado su blog que ahora me servirá par continuar con mis propósitos, pues además no creo que sea fácil mantener un acuario de este, tipo por lo que especifica en su blog pero lo intentare y si no pues ya estaré por aquí molestándolo para preguntarle de este tipo de acuarios.

Bueno le mando saludos.
Atte.: Miguel Ángel G.M.